Esta historia nace en las cenizas del enésimo colapso del proyecto choli. Desde el “honor” de ser humillados por la bosta en la final de la Sudamericana, los proyectos cholis se han ido quemando uno tras otro y cada vez mas humillantemente. El penúltimo escalón de esta (segunda) caída al pozo sin fondo del descenso fue la vergonzosa actuación choli en el Hexagonal.
Este nuevo fracaso significo la caída en desgracia final de chola con Chamarra, otrora Ángel Chamarrero, artífice de los mayores pendejeadas en materia de construcción de equipos. Tal fue la debacle choli que las ratas, empezaron a abandonar el barco mucho antes del hundimiento final, dejando a un pobre infeliz a cargo de los escombros del naufragio.
Esta difícil coyuntura fue aprovechada por una joven y resplandeciente estrella del firmamento celeste. Donde las chamarras habían fallado las bombachas con encaje de esta hada madrina de la intriga vencerían. Pronto la joven pero atrevida chola conquisto al caduco dueño del circo, con promesas de crear un proyecto nuevo que no pararía hasta lograr el esquivo Hexa alcanzado solo por sus mayores.
Para capitanear esta armada de balsas de totora la insidiosa chola pensó nada más y nada menos que en La Vaca, una de las pocas tontas útiles que se habían hundido con el anterior proyecto.
Y así, sobre los cadáveres acribillados de goles de Jesus Reynaldo y su cuerpo técnico fantasma, se firmó un pacto de conveniencia que debía durar mil años de Reich choli...
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CAPITULO II: “EL QUE SE FUE POR DISNEY-GUOR PERDIO SU PUESTO DE ENTRENADOR”
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